domingo, 31 de enero de 2010

Surrealismo, Onirismo y Psiquedelia

A Study in Choreography for the Camera de Maya Deren

http://auteurs_production.s3.amazonaws.com/stills/32652/a-study-in-choreography-for-camera-1945.jpg

Me gusta el blanco y negro tan contrastado. Esta imagen en especial con el personaje principal a contra luz con las nubes grises creando la ilusión de ser energía visible que se desprende del brinco del bailarín, tanto como si el calor se pudiera ver. Me gusta que no se distinga la ropa de la piel, que lo único importante sea la forma, que el movimiento sea casi imperceptible cuando se analiza detenidamente, pero que al verla uno no pueda dejar de verlo saltar y caer, que el detalle de su pie borroso nos confiese el movimiento. Que el encuadre y la posición del bailarín delaten lo efimero del momento, cómo en un instante el bailarín escapará del cuadro y tan sólo quedará un fondo blanco insípido.

El Discreto Encanto de la Burguesía



Cuando te enseñan a escribir un guión lo primero que te explican es que ninguna escena puede ser gratuita, que tienes que saber el porqué de toda situación, desmenusarla hasta que nada se te escape y el mundo que estás creando sea de tu completo dominio. Carrière y Buñuel crean esta escena, fascinante justamente porque desafía todas las reglas, cualquier productor (menos, afortunadamente, Silverman) hubiera editado la secuencia pues parece no tener ni pies ni cabeza y sin embargo ¡uno no puede olvidar la escena justamente por eso! Cuando pienso en el discreto encanto de la burguesía es de las primeras escenas que viene a mi mente. Surreal completamente, no hace sentido en prácticamente ningún contexto.

En la vida diaria uno siempre se topa con este tipo de incongruencias, por ejemplo, el otro día baje a la tiendita del edificio de mi abuela y vi a una señora (hiper-mega-archi-nice jaja) chismeando encantada con la chica que atiende, para mi mayor sorpresa la señora ni siquiera tenía bolsas ni artículos de la tienda, tan absurdo como imaginar que una señora de las lomas baja a saludar a su amiga de la tiendita simplemente por el gusto de hacerlo. Aunque me hubieran explicado las razones que justifican ese escenario, probablemente lo habría tachado de inverosimil de haberlo visto en cualquier película.

Carrière se sorprendía de que la gente no distinguiera la diferencia entre las secuencias oníricas y las de la vida real dentro de la película (debido a que buñuel no quiso darles ningún tratamiento visual distinto). Desde hace unos años la expresión "De película" es sinónimo de inverosimil, exagerado, poco realista, en parte gracias al cine de hollywood que se ha encargado de generar esas relaciones. A mí me sorprende más la necesidad de la gente de creer en lo normal, cuando en la vida diaria hay momentos absurdos, coincidencias y casualidades impresionantes, que tristemente han dejado de sorprendernos, pero si tomaramos conciencia de lo "de película" que resulta la vida, no podríamos quitar la cara de asombro o tal vez nos resultaría tan aterrador que no querríamos salir nunca de nuestras casas...

Introducción

The Way Things Go de Fischli & Weiss

http://www.designboom.com/tools/WPro/images/blog10/lauf1.jpg

Esta secuencia es de mis favoritas. El movimiento de los rollos de cartón me resulta a la vez estresante y fascinante. Resulta raro que algo tan sencillo pueda generar tanto estrés, pero con cada golpe, la tensión aumenta, las posibilidades de que el siguiente golpe resulte satisfactorio van disminuyendo y uno cree sentir que la fuerza de la reacción en cadena se va perdiendo con cada golpe y ver que la energía continúa haciendo de las suyas, evita que uno pueda dejar de ver, tanto como ver un truco de magia y saber que hay algo falso en todo eso y luchar por entender y descifrarlo todo sin poder ocultar la fascinación de verse desafiado por la ilusión y no sólo eso, verse vencido y darse cuenta de que la inteligencia sólo llega hasta cierto punto y encontrarse deseando no querer descubrir el secreto que yace debajo de la aparente magia.
Me gusta la magia, me gusta no entender ciertas cosas, el misterio, la falta de sentido y de lógica, me gusta que no todo se pueda resolver pensando, me tranquiliza saber que no somos lo más grande, al mismo tiempo que me motiva a intentar serlo.



Wittgenstein de Derek Jarman

http://www.gaypeopleschronicle.com/evenings_out/wittgenstein.jpg

La filosofía es una de las cosas que más me llama la atención. Siempre he creído que las respuestas se encuentran escondidas entre esos textos indigeribles.

"Happy people don't worry about the meaning of life" dice Alexander en Offret de Tarkovsky.

http://img.youtube.com/vi/Mr5cYiRPf3E/0.jpg

Hace un año intenté leer a Nietzsche, pero lo tuve que dejar por el bien de mi salud mental. Tal vez fue que lo combiné con Freud y Bergson. No lo sé, pero son escritos que aparentemente lees como cualquier otro y sin embargo algo generan, liberan un switch y algo empieza a funcionar, algo que estaba dormido y de repente la comida ya no se come igual y el tráfico ya no avanza a la misma velocidad y te meten tantas dudas que te hacen pensar que Tarkovsky tenía razón cuando escribía que mientras más conocimiento obtienes más infeliz eres. Afortunadamente la crisis pasa y uno vuelve a coquetear con la idea de retomar a Nietzsche (de manera más cautelosa, por supuesto). Y este tipo de cosas pasan con esta película también, con mucho del buen cine, parece que sólo están compuestas de imagen y sonido pero hay algo más ahí que te cambia aunque no lo entiendas o no te des cuenta.

Al final, tal vez la filosofía genera más preguntas que respuestas, tal vez ahí está su fuerza, tal vez con el cine pasa igual. Si nos dieran las respuestas ya habríamos dejado de leer hace mucho tiempo. El misterio le da sentido al sentido.